Extra Final: Espérame después de la escuela
Chen Jingshen y Yu Fan se acercan a la felicidad
⊱✿⊰
Extra del libro en físico, donado por Peachy.
Un viernes de otoño, Chen Jingshen estaba empacando sus cosas cuando Luo Liyang llamó a la puerta.
“¿Te vas?" Luo Liyang asomó la cabeza. “Ah, pediste permiso esta tarde, ¿verdad?"
“Sí, voy a Ningcheng". Chen Jingshen preguntó: “¿Qué pasa?"
Luo Liyang se acercó con una sonrisa y dejó una pequeña maceta sobre su escritorio.
“Nada. Tu cuñada volvió a poner al día mi equipo y me pidió que te trajera uno también. Dijo que tu escritorio siempre está vacío, tan anticuado que da pena. Te lo dejo aquí, diviértete este fin de semana."
Chen Jingshen dio las gracias.
Debido a esto, al salir de la empresa, Chen Jingshen inconscientemente miró los escritorios de los demás. De hecho, todos tenían adornos: figuras, colgantes, pequeñas plantas en macetas... y, sobre todo, lo más común eran los marcos de fotos de familia, amigos o parejas.
Cuando llegó al edificio de oficinas de Yu Fan, este estaba sentado en un banco al borde de la calle, trabajando duro con la computadora en brazos.
“¿Por qué no estás en la oficina?", preguntó Chen Jingshen después de que subiera al auto.
“No es fácil estacionar por aquí". Yu Fan se sentó en el asiento del pasajero y tecleó velozmente. “Esta es la última imagen. En cuanto la edite, dejaré la computadora en tu auto, no me la llevó."
El estudio de Wang Yue se mudaría oficialmente al día siguiente, y los habían invitado a asistir a la ceremonia de inauguración en Ningcheng. Habían reservado un vuelo para la tarde, y llegarían justo a tiempo para cenar con Wang Yue.
Esta vez, el cliente tuvo muchas exigencias, y Yu Fan estaba verificando un elemento a la vez, cuando escuchó el crujido de una bolsa; Chen Jingshen le entregó un sándwich.
El aroma llenó su boca.
Yu Fan había estado de viaje por trabajo en una ciudad vecina durante los dos últimos días, y acababa de regresar esa mañana. Desde que se despertó solo había desayunado una vez, y fue algo que Chen Jingshen había encargado para él.
No se dio cuenta del hambre hasta que tuvo la comida en la boca y sintió el vacío en el estómago.
El sándwich estaba muy lleno, Yu Fan tardó bastante en masticar cada bocado. Después de terminar finalmente todo el sándwich, Chen Jingshen le entregó un bollo de piña con mantequilla del tamaño de su cara.
Con las mejillas abultadas por el sándwich, Yu Fan dijo indistintamente con cara de madera: "Chen Jingshen, ¿estás alimentando a un cerdo?"
“Es el producto estrella de la nueva panadería bajo la oficina. Mis colegas dijeron que estaba delicioso. Estuve media hora en la fila para comprarlo. Quería que lo probaras". Chen Jingshen dijo: “Esta bien si no quieres, no importa, la próxima vez traeré otro."
“......"
Al final, el bollo también terminó en el estómago de Yu Fan.
Chen Jingshen había calculado bien. Cuando bajaron del avión y llegaron al restaurante donde se encontrarían con Wang Yue, Yu Fan acababa de terminar de digerir el almuerzo.
Al verlo, las primeras palabras de Wang Yue fueron: “¡Dios mío, Yu Fan, ¿realmente eres capaz de engordar!?"
Antes, Yu Fan solía estar demasiado delgado, con mejillas finas y marcadas, siempre con un aire agresivo y poco accesible. Ahora, con un poco más de carne, su rostro se había suavizado y se veía menos feroz: era guapo en su punto justo.
“Siempre he tenido carne". Yu Fan respondió sin expresión.
Wang Yue ignoró su comentario absurdo. Le dio una palmada en el hombro a Chen Jingshen y dijo con cara de admiración: “Antes, solía pedir tres comidas al día para el estudio. La comida era tan buena que otros pensarían que nuestro estudio estaba en la bolsa, pero él simplemente no ganaba peso. Nunca había visto a alguien tan difícil de engordar. ¡Eres increíble!"
Chen Jingshen: “Gracias."
Yu Fan: “……"
Desde que Yu Fan la llamó ‘hermana’ en el aeropuerto, Wang Yue lo había adoptado como si fuera su propio hermano menor. Durante toda la cena se dedicó a cuidarlo, y darle consejos sin parar.
Yu Fan, poco acostumbrado a ser regañado así, se sentía molesto, pero aun así respondió obedientemente a cada palabra.
Después de la comida, bajo las advertencias y los golpecitos de Wang Yue, Yu Fan fue quien pagó la cuenta.
“¡Oye, niño! ¿Sabes lo que significa ser anfitrión? ¿¡Cómo te atreves a pelearte con la anfitriona por pagar!?"
Yu Fan respondió: “¿No dijiste tú misma que esta sigue siendo mi casa?"
Wang Yue se quedó sin palabras y le dio otra palmada en el brazo, riendo.
Al salir del restaurante, Yu Fan estaba por irse con Chen Jingshen, pero los llamaron.
Wang Yue: “¡Ustedes dos no se vayan todavía! Acompáñenme al Templo Chongfu".
El Templo Chongfu era un pequeño templo en Ningcheng, cerca del restaurante, y al que se podía llegar en un caminata a pie.
Yu Fan preguntó confundido: “¿A qué?"
“Devolver un deseo. Antes encendí una lámpara allí, rezando por la prosperidad, ¡y ahora que el estudio se ha trasladado a un gran piso en el centro de la ciudad, tengo que agradecer a Buda y a los Bodhisattvas!" Wang Yue siseó: "Un momento, ¿no fuiste conmigo aquella vez? ¡Podemos devolver el deseo juntos!"
“¿Cuándo…?" Yu Fan de repente se detuvo a mitad de la frase.
“¿Lo has olvidado?" Wang Yue recordó. “¿Parece que fue cuando llegaste por primera vez a Ningcheng, creo que en 2018?"
Los recuerdos perdidos se volvieron claros de repente. Al recordar lo que había hecho, el corazón de Yu Fan dio un vuelco y se apresuró a negarlo: "Yo no pedí ningún deseo".
“¿Cómo es eso posible?" Wang Yue lo recordó completamente y rió: “En ese momento eras tan pobre que no tenías ni para comprar la placa de deseos. ¿Qué fue lo que deseaste? Hasta preferiste pedir dinero prestado para colgar esa placa”.
¿Un deseo? ¿Colgar una placa?
Chen Jingshen giró la cabeza para mirarlo. Yu Fan y él habían ido al templo dos veces. La primera vez, Yu Fan pretendió ser un Dios y Buda al escribir un amuleto de paz para regalar; la segunda vez, ni siquiera entró al salón principal.
“No lo hice". Al sentir la mirada de Chen Jingshen, Yu Fan mintió inexpresivamente.
“Está bien, está bien". Wang Yue lo dejó pasar con un gesto. “Aunque no lo hiciste, igual acompáñame a ir. Por ahí cerca hay una nueva calle de aperitivos. Después de rezar, los llevaré a comer un postre."
Yu Fan: “Todavía me faltan algunas imágenes por editar."
“¿Acaso estoy ciega? ¿Crees que no vi que trajiste tu computadora?"
“Chen Jingshen tiene una reunión esta noche". Yu Fan tiró de la ropa de la persona que estaba a su lado, apretó los puños y la amenaza fue obvia.
Wang Yue lo miró: “¿En serio?"
Chen Jingshen fingió no recibir la señal y dijo con calma: “Tal vez. Recién me avisaron".
Yu Fan: “……"
Al final, fueron obligados a ir.
Después de entrar al templo, Yu Fan inconscientemente buscó el marco de madera en sus recuerdos. Una sola mirada le bastó para calmarse.
Al lado derecho del templo había un árbol de higuera, en el que se colgaron un montón de cintas de oración. Bajo el árbol había unas cuantas filas de estantes de madera, densamente colgados con tablillas de deseos, apiladas una encima de la otra, y no se podía ver nada claramente a simple vista. La placa que había colgado hace unos años era imposible de distinguir.
Además, con tantos peregrinos colgando placas con los deseos, la suya probablemente habría sido retirada hace mucho tiempo.
Yu Fan suspiró aliviado. Luego de ver a Wang Yue entrar al salón principal, se dio la vuelta para buscar a cierta persona y ajustar cuentas.
Chen Jingshen estaba junto al marco de madera en el extremo derecho. Bajó la cabeza y miró cierta placa de deseos que acababa de tomar en su mano.
Yu Fan frunció el ceño y se acercó. Tiró de la muñeca colgante de Chen Jingshen con cara de pocos amigos y dijo en tono feroz: "Chen Jingshen, no mires las placas de otras personas. ¡Tú hace rato...!"
Yu Fan se tragó el resto de las palabras después de leer las palabras en la placa.
La placa en las manos de Chen Jingshen ya mostraba signos del paso del tiempo, y su color era mucho más claro que las otras colgadas a su alrededor. Sin embargo, la tinta negra con la que estaba escrita no se había desvanecido en lo más mínimo. Con letras torcidas y gruesas, decía:
—Deseo que Chen Jingshen tenga éxito en el examen de ingreso a la universidad.
¿¡Qué!? ¿¡En serio!?
La mente de Yu Fan se quedó completamente en blanco, mirando esas palabras con una expresión de absoluto asombro.
¿Qué pasa con este templo? ¿Cuántos años lleva colgada esa placa y todavía está aquí? ¡¿Tan mal les va en el negocio?!
... Y además, con tantas tablillas colgadas aquí, ¿cómo fue que Chen Jingshen justo encontró esa?
Yu Fan se quedó rígido y no reaccionó durante un tiempo, hasta que Chen Jingshen volvió la cabeza para llamarlo: "Yu Fan".
El templo estaba iluminado con faroles de piedra y el resplandor cálido reflejaba su perfil. Sus ojos parecían brillantes y gentiles cuando lo miraba, y dijo:
"Mi nombre está aquí".
"..."
"Oh. La persona que hizo el deseo tiene tu mismo nombre", Yu Fan dijo con la boca más dura que un puño.
"Sí". Chen Jingshen respondió: “La letra es tan fea que tarde un rato en reconocerla".
Le pisaron el zapato con una presión ni muy fuerte ni muy débil, y antes de que Chen Jingshen pudiera dejar de sonreír, le jalaron la ropa. Yu Fan tiró de él y lo arrastró para alejarlo, mientras decía con tono duro:
"... No andes espiando las placas de otras personas. Vámonos".
"Un momento". Chen Jingshen lo sujetó del brazo. "¿No debería entrar y devolver yo también el deseo?"
Yu Fan lo miró, confundido: "¿Devolver qué? Ni siquiera hiciste un examen para ingresar a la universidad——"
Yu Fan miró la sonrisa en los labios de Chen Jingshen y, en ese momento, el arrepentimiento le caló hasta el alma.
¿Se le había fundido el cerebro en aquel entonces? De lo contrario, ¿cómo se le ocurrió venir a este lugar con Wang Yue y colgar una placa de deseos? Si con sólo pensarlo ya sabría que Chen Jingshen no tenía ninguna necesidad de hacer el examen de ingreso a la universidad con sus calificaciones...
Cuando Wang Yue salió, vio a Yu Fan con una cara oscura, agarrando a Chen Jingshen, y los dos estaban parados como castigados junto al árbol de los deseos.
"¿Qué hacen?", Wang Yue los miró divertida y levantó las cosas en sus manos. "Miren, tomé tres placas de deseos. Esta vez, pongamos nuevos deseos en ellas".
La cara de Yu Fan empeoró aún más: "No. Ya dije que no creo en esas cosas".
"No dijiste eso antes". Wang Yue respondió pero no lo forzó: "Depende de ti. Entonces escribiré un deseo extra". Luego miró a la otra persona: "¿Y tú? ¿Quieres una?"
Chen Jingshen tomó una placa: "Gracias".
Naturalmente, nadie más puede pagar el dinero de la placa de deseos. Chen Jingshen le transfirió el dinero a Wang Yue, tomó una pluma prestada y escribió su deseo.
Al terminar, justo cuando estaba a punto de colgar la placa en el estante de madera, la persona que se había mantenido alejada hasta entonces se acercó de repente.
"Espera un minuto". Yu Fan lo detuvo y miró el deseo que había escrito.
Han pasado los años, y su propia caligrafía seguía pareciendo escrita por un perro, pero la de Chen Jingshen se había vuelto cada vez más clara y hermosa.
Yu Fan le arrebató la pluma, y añadió un pequeño detalle delante de su nombre con cara fría y el ceño fruncido, escribiendo con cuidado, carácter por carácter:
—Chen Jingshen.
La placa de deseos de Wang Yue, naturalmente, debía colgarse en el punto más alto. Cuando terminó de lidiar con eso y regresó, Chen Jingshen acababa de colgar la suya.
Wang Yue dijo: "¿Ya las colgaron? Vamos, los llevaré a comer postres".
Yu Fan ya no podía mirar directamente este lugar. En cuanto escuchó eso, se giró inmediatamente: "Vamos".
"Espera". Chen Jingshen lo detuvo. "¿Puedes tomarnos una foto juntos?"
¿Una foto? ¿Tú y quién más? Yu Fan se giró para preguntar, sólo para darse cuenta de que Chen Jingshen estaba mirando a Wang Yue.
Wang Yue: "Por supuesto".
Chen Jingshen sacó su teléfono, encendió la cámara y se lo entregó: "Gracias".
Incluso cuando lo llevaron al árbol de los deseos, Yu Fan aún no se había recuperado. Quedó atónito: "Espera, ¿por qué de repente quieres una foto…?"
Wang Yue: "Tres…"
"Quiero una foto contigo", respondió Chen Jingshen.
Yu Fan siempre era quien fotografiaba a los demás, y podía contar con los dedos de ambas manos la cantidad de veces que había salido en una. Dijo incómodo: "Olvídalo, será para la próxima. Mi cabello está muy desordenado..."
Wang Yue: "Dos..."
Chen Jingshen lo atrajo de nuevo, y le dijo: "Quiero ver esta foto todos los días a partir de ahora. Sonríe".
Yu Fan se sobresaltó: "¡No eres tú el pervertido! ¿Por qué quieres mirarme todos los días? ¡No quiero…!"
Wang Yue: "¡Uno!"
¡Clic!
●°•°°•°●
El lunes, cuando Luo Liyang fue a trabajar, se dio cuenta de que la cafetería que frecuentaba tenía una promoción de tres por uno. Fiel al espíritu de que ‘quien no aprovecha, es un tonto’, ingresó a la empresa llevando tres tazas de café.
Le dio una a su asistente y, al ver la oficina de al lado vacía, preguntó:
"¿Dónde está tu hermano Shen?"
"No lo sé, estaba aquí hace un rato. ¿Quizás fue al baño?"
Luo Liyang asintió, abrió la puerta y entró en la oficina de Chen Jingshen sin dudarlo, dejó el café sobre el escritorio y se fue.
Pero apenas había dado unos pasos cuando se detuvo, y se dio cuenta de que algo andaba mal. Retrocedió sin voltear la cabeza y miró el escritorio de su amigo.
En el escritorio de Chen Jingshen, junto a la pequeña maceta que había dejado allí la semana pasada, ahora había tres marcos de fotos.
En el primero, había una foto recortada de lo que parecía ser una foto grupal de alumnos en un evento escolar de primaria. La foto había sido recortada casi por completo, dejando sólo a los dos niños pequeños en el extremo izquierdo.
El segundo marco mostraba la foto de seis adolescentes de espaldas. Parecían muy unidos, y el fondo era claramente un parque de diversiones.
Y el tercer marco contenía una foto nueva.
En ella, dos hombres jóvenes estaban parados uno a lado del otro bajo un pino lleno de tiras rojas de buenos deseos. Ambos se veían incómodos al ser fotografiados, y sus sonrisas eran un poco forzadas, pero juntos transmitían una armonía extraña.
A un lado de ellos, se alcanzaba a ver parte del estante lleno de placas de deseos. Si uno miraba con atención, incluso se podían leer las palabras de la placa más visible:
—Chen Jingshen y Yu Fan. Felices por siempre.
6 Comentarios
Muchas gracias por subirlo!!!!! Eres la mejor ToT
ResponderBorrarAl contrario, muchas gracias a ti por tu donación 🧡
BorrarMuchas gracias, podría alguien recordarme quien era luo liyang, por favor
ResponderBorrarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
BorrarEra el amigo de Chen Jingshen, el que trabaja con él
BorrarMuchas gracias por la traducción, he disfrutado mucho la lectura ❤️
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